A través de una iniciativa inédita, el Hospital del Trabajador ACHS desarrolla un protocolo que busca entregar a los pacientes herramientas para el manejo del estrés postraumático originado por accidentes, enfermedades o asaltos en el contexto laboral.
Durante 12 sesiones realizadas en un periodo de dos meses trataron a seis pacientes, de los cuales dos lograron dejar de consumir medicamentos para inducir el sueño, dado que pudieron reemplazarlos por ejercicios de respiración y técnicas de relajación aprendidas del yoga.
Esa fue la primera vez que el Hospital del Trabajador ACHS incluyó dicha práctica como terapia complementaria para tratar traumas psicológicos, en el servicio de Psiquiatría y Psicología del establecimiento. El equipo estuvo formado por el doctor Rodrigo Gillibrand, jefe del servicio; las psicólogas de esa unidad, Carmen Gloria Carbonell y Katya Storm; la asistente social del hospital e instructora de yoga, Isabel Griñen, y la instructora María Alejandra Mezú.
Los pacientes tenían un factor común: habían sido víctimas de asaltos en el contexto laboral, por lo que la práctica se centró en tratar las secuelas emocionales de esos eventos. Posturas de pecho, fortalecimiento del equilibrio y ejercicios de respiración fueron algunas de las técnicas que se trabajaron.
Actualmente, el hospital está trabajando en un protocolo para el manejo del estrés postraumático originado por asaltos, enfermedades y accidentes en el trabajo. De esa forma, se proyecta como pionero en la incorporación de prácticas que ayuden a tener mejores resultados en el tratamiento y que permitan la pronta reinserción de los afectados a su entorno laboral y social.
El psiquiatra, médico que supervisa todo el tratamiento, deriva al paciente a una terapia psicológica y también a una complementaria; el yoga, el cual trabaja los aspectos físicos del trauma.
La asistente social Isabel Griñen comenta que los beneficios que entrega dicha práctica son múltiples: "Mejora la calidad de vida porque regula el sueño gracias a una buena respiración. Al trabajar la parte física se liberan distintas hormonas y las personas entran a un estado de mayor relajación. También el paciente empieza a tomar más agua, a comer más sano y a estar más concentrado".
La asistente social e instructora añade que utilizar terapias complementarias en la medicina tradicional es algo aún nuevo en Chile. "Hay estudios que lo avalan y está científicamente comprobado que sirve. Por ejemplo, en lugares como Colombia los rehabilitados de la guerrilla están siendo tratados con yoga como forma complementaria. Nuestro respaldo es apoyarnos en estudios científicos de distintas universidades que lo han comprobado", indica. Algunas experiencias están documentadas en publicaciones como el Journal of Traumatic Stress y otras revistas científicas.
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